(7) Los Jenízaros (del turco, yeniçeri, “nuevas tropas”) fue un cuerpo de élite organizado por el sultán Murad I (1326-1389) en la segunda mitad del siglo XIV, pero creado por su padre Orján Gazi (1288-1360). Los ejércitos otomanos se habían formado hasta entonces mediante levas tribales turcomanas leales a los líderes de su clan, pero a medida que el desarrollo político otomano adquirió las características de un Estado, se hizo necesario tener tropas pagadas, únicamente leales al sultán. Después, se instituyó el sistema de atraer a jóvenes cristianos (devshirme); convertirles al Islam y darles el mejor adiestramiento, transformándoles en la élite del Ejército. Su vida diaria estaba regida por leyes especiales, que les apartaban de la vida civil; incluso se les prohibía el matrimonio. La devoción a esa disciplina convirtió a los jenízaros en la mejor división de ejército del mundo de entonces. Sin embargo, estas normas cambiaron con el tiempo; el reclutamiento se relajó y debido a los privilegios de que disfrutaban, su número ascendió de aproximadamente 20.000 en 1574 a unos 135.000 en 1826. Para aumentar sus sueldos, los jenízaros comenzaron a ejercer distintas relaciones comerciales y establecieron fuertes vínculos con la sociedad civil, reduciendo de este modo su lealtad al sultán. En algunos momentos se convirtieron en personas influyentes y en aliados de las fuerzas conservadoras, oponiéndose a toda reforma y evitando permitir que se modernizara el Ejército. Su impotencia para aplastar la insurrección griega a comienzos de la década de 1820 les desacreditó completamente, y animó al sultán Mahmud II a proyectar su eliminación. Cuando se alzaron en 1826, este último disolvió el cuerpo por decreto y eliminó toda oposición por la fuerza.
(8) La lengua turca, también conocida por osmanlí o turco otomano, es el idioma nacional de Turquía y de las minorías turcas que viven en Asia central, los Balcanes y el Oriente Próximo. Relacionado con el azerbaÿaní y el turkmenistaní, es el miembro de la subfamilia altaica que más se habla. Procede de la lengua que trajeron los turcos selÿukíes al Asia Menor en el siglo XI. Otras veces se le ha llamado antiguo anatolio y ha sido la lengua de todo el Imperio otomano. Su alfabeto originario fue el árabe. Durante siglos el turco ha recibido numerosos arabismos léxicos y sintácticos, así como una clara influencia del persa. A partir de 1929, Mustafá Kemal, llamado Ataturk (“padre de los turcos”), ordenó la adopción del alfabeto latino y las expresiones tomadas de otras lenguas se sustituyeron por derivadas del turco.
(9) Las Guerras Turco-rusas fueron una serie de enfrentamientos entre Rusia y el Imperio otomano producidos durante los siglos XVII, XVIII y XIX, a medida que Rusia se hacía con el control de la costa norte del mar Negro y ampliaba su esfera de influencia en los Balcanes.
(10) Los rusos destruyeron la flota turca situada en el puerto de Sinope, en el mar Negro, el 30 de noviembre de 1853, lo que provocó una enérgica protesta de Gran Bretaña y Francia. Rusia ignoró la demanda por la que reclamaban la evacuación de Moldavia y Valaquia, y ambos países le declararon la guerra en marzo de 1854, confiando en que su supremacía naval les proporcionaría una victoria rápida. El reino italiano de Cerdeña se unió poco después a esta coalición anglo-francesa, con la esperanza de ganar su favor y obtener su ayuda para expulsar a los austriacos de los pequeños reinos de Italia. El 3 de junio, Austria amenazó con declarar la guerra a Rusia, que quedó consternada al recibir la noticia, a menos que desocupara Moldavia y Valaquia. Rusia cumplió esta petición el 5 de agosto y las tropas austriacas ocuparon ambos principados. Fue en este momento cuando los aliados decidieron emprender una campaña contra Sebastopol(situado en Crimea), donde se encontraba el cuartel general de la flota rusa emplazada en el mar Negro; sus fuerzas alcanzaron Crimea en septiembre de 1854. La guerra se prolongó, a pesar de las cruentas derrotas que sufrieron los rusos en el río Alma y en las batallas de Balaklava y de Inkerman, debido a la negativa de Rusia a aceptar las condiciones de paz propuestas por los aliados. Finalmente, Sebastopol cayó el 9 de septiembre de 1855, pero Rusia aceptó firmar la paz sólo después de que Austria amenazara con intervenir en la guerra. Desde el punto de vista militar, esta guerra representó un acontecimiento desafortunado e innecesariamente costoso. Los comandantes de ambos bandos demostraron claramente su ineptitud desperdiciando vidas en combates absurdos, tales como la famosa “carga de la Brigada Ligera”, en la que una unidad británica sufrió graves pérdidas durante la batalla de Balaklava (25 de octubre de 1854). La ineficacia y la corrupción de las administraciones obstaculizaron el abastecimiento de alimentos, ropa y municiones en ambos ejércitos, y los servicios médicos no recordaban una situación tan atroz. La enfermera británica Florence Nightingale (1820- 1910), conocida como The Lady with the Lamp (“La Dama con la lámpara”) adquirió fama por los esfuerzos que realizó para mejorar el cuidado de los enfermos y heridos. Gracias a sus servicios, se distinguió por ser la primera mujer en el mundo que recibía una medalla de honor de un sultán (Abdulmakid I). Pero fueron las enfermedades y no los combates, las que provocaron el mayor número de víctimas. La opinión pública británica también fue adquiriendo una actitud más crítica ante la guerra a medida que leía las crónicas enviadas al periódico The Times por el corresponsal de guerra irlandés William H. Russell (1820- 1907), el primer periodista que relató un conflicto bélico por medio del telégrafo. La Guerra de Crimea quedó reflejada en la obra de Alfred Tennyson (1809-1892) “La carga de la brigada ligera”, y en las “Historias de Sebastopol” de Lev Tolstoi (1828-1910).
(11) Este calificativo fue utilizado por primera vez por el zar Nicolás I (1796-1855) en una conversación con el embajador británico en San Peterburgo, Sir Hamilton Seymour, en enero de 1853.
Bibliografía complementaria
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R.H. Shamsuddín Elía
Profesor del Instituto Argentino de Cultura Islámica